El control y la evaluación en el ministerio cristiano

 

 

Por Abdiel Morfa


La evaluación consiste en comparar los resultados finales de un período de tiempo predeterminado, con aquello que esperábamos obtener cuando trazamos nuestras metas, objetivos y planes. En tal sentido, encontramos en la Biblia algunas expresiones de evaluación en diferentes ámbitos de la vida. A continuación menciono algunos ejemplos:

·         En Génesis 1:31 se nos dice: “Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera”.

·         En 1ro Samuel 7:12 encontramos una célebre frase pronunciada por Samuel en el contexto de la contundente victoria que Dios les dio sobre los filisteos: “…Eben-ezer, diciendo: Hasta aquí nos ayudó Jehová”.

·         Otros pasajes que podemos considerar en esta dirección en el Nuevo Testamento son: Lucas 17:10; 2da Corintios 11:16-33 y 2da Timoteo 4:6-8.

Antes de continuar presentando los aspectos vitales de la evaluación, es menester aclarar la diferencia que existe entre esta y el control administrativo, pues comúnmente tienen a confundirse ambas acciones. Al comienzo de este artículo señalamos que la evaluación consiste en comparar lo obtenido con lo esperado, pero el control consiste en ver que cada cosa sea hecha de acuerdo con el plan que se ha adoptado en la medida que avanzan las acciones que se ejecutan. Por tal razón, el control se aplica constantemente durante la trayectoria de la acción, a diferencia de la evaluación que ocurre al final. Además, el control es directo e inmediato, pero la evaluación sigue un orden cuidadoso y un estudio detenido de toda la información. Finalmente, el control permite hacer los ajustes y correcciones necesarios, mientras la evaluación permite distinguir, honrar y recompensar a cada cual según sea el caso.

 


1.     Una metodología para el control y la evaluación


Es muy necesario que el administrador haya orientado y entregado por escrito a cada miembro del personal su contenido de trabajo, cada detalle de sus responsabilidades y un calendario que incluya día de control e informes, entre otras cosas importante. Es por medio de este documento o contrato que el administrador va a chequear o controlar el avance de cada uno.

Para poder tener un cuadro general de lo que está ocurriendo en la organización debe evaluarse:


a.      El avance hacia el plan

Para lograr esto:

·         Determine que es lo que usted quiere evaluar.

·         Determine con qué frecuencia va a evaluar cada área.

·         Establezca que método o combinación de método deben usarse para obtener la información que necesita. Los más conocido son:

§  Informe numérico o resumen estadístico.

§  Informe descriptivo.

§  Observación personal.

 

b.      El desarrollo del personal

Es muy útil una entrevista cada 6 meses o un año con cada miembro del personal para:

q  Asegurar una atmósfera de comunicación y diálogo.

q  Descubrir lo que se debe hacer para desarrollar al máximo posible a cada uno.

q  Dar asesoría, consejo e información y orientaciones.


Otro aspecto importante es hacer las correcciones necesarias. Un sencillo procedimiento es el siguiente:


a.       Identifique el problema.

b.      Establezca un criterio básico para escoger la solución satisfactoria. Es decir, apártese por un momento del problema y revise los reglamentos, estatutos, los procedimientos acordados, los objetivos, la meta, etc.

c.       Considere las alternativas.

d.      Escoja una alternativa.

e.       Ponga en práctica su alternativa.

f.       Evalúe las decisiones tomadas y aplicadas.

 

  

2.     Objetivos de la evaluación del personal


a.       Analizar la actuación de cada uno.

b.      Reforzar la motivación y el compromiso de cada uno.

c.       Otorgar estímulo y recompensa.

d.      Mejorar el desempeño de cada uno para el siguiente período.

e.       Mejorar la capacitación.

f.       Hacer las modificaciones necesarias para mejorar la administración.

 


3.     Tipos de Evaluación


a.      Evaluación vertical

 Es aquella donde el líder o jefe superior inmediato es el encargado de evaluar al trabajador que está bajo su supervisión.

 

b.      Evaluación horizontal


Es aquella donde personas de un mismo nivel se evalúan mutuamente. Este tipo de evaluación es muy buena porque permite mejorar el desempeño en puestos que son similares, y se facilita la retroalimentación en un clima menos tenso que la vertical.


c.       Evaluación de 360 grados


Es aquella que se logra integrando la opinión de todos aquellos que están alrededor del evaluado. Es decir, aportan información los jefes superiores, los colegas del mismo nivel, los clientes, etc. Últimamente está creciendo mucho el interés por este tipo de evaluación porque permite tener un concepto más general y completo sobre el desempeño de los trabajadores.


d.      Autoevaluación


Es aquella donde el propio empleado se evalúa. La ventaja de este tipo de evaluación radica en que permite a la persona descubrir por sí mismo los puntos fuertes y débiles de su desempeño y por lo general esto conlleva una mejor aceptación de la necesidad de superar los aspectos negativos. Por otra parte, permite a la persona ser totalmente sincera consigo mismo y evita ciertas incomodidades que en ocasiones provoca el hecho de que otra persona te señale los problemas.

 


4.     Errores en la evaluación personal


a.      Efecto de aureola o sobreestimación (favoritismo)

·  Por actuaciones anteriores sin evaluar los resultados presentes.

·  Compatibilidad y simpatía.

·  Efecto de lo reciente (buen resultado en el último trabajo).

·  Efecto de la fama y los títulos.

·  El efecto de no quejarse (no siempre el silencio habla de que todo marcha bien)

·  El efecto del punto ciego (el supervisor no ve el defecto porque son los suyos)

 

b.      Efecto de la hipercrítica o subestimación

·  El jefe es un perfeccionista.

·  El subalterno contradice al líder.

·  Efecto de la asociación (por asociarse con personas no gratas y no por los resultados en sí)

·  Efecto de los temperamentos (el líder no comprende a su supervisado por tener un temperamento muy diferente al de él).

·  La comparación consigo mismo (el jefe usa como regla para medir su propio conocimiento y experiencia)

 

 

5.     Dos comentarios finales

El papel del evaluador consiste en alentar y guiar al evaluado por medio de la evaluación. Debe ser un conducto o catalizador y no un juez e inquisidor. Por otra parte, el evaluador debe preparar la evaluación al menos unos quince días antes, y debe ordenar los aspectos a evaluar en orden de importancia.

El evaluado debe recibir la oportunidad de discutir su desempeño. Entre otras cosas debe medirse el progreso, el cumplimiento de los objetivos, el enfoque de trabajo y su desempeño personal. Otra cosa digna en este proceso es ofrecerle al evaluado con tiempo suficiente de antelación algún tipo de formulario o guía de autoevaluación.

 

En resumen, no debemos confundir el control con la evaluación, aunque ambos son de vital importancia en el proceso administrativo. Es importante destacar que el principio de evaluación podemos verlo a través de toda la Biblia.

Por otra parte, si queremos tener éxito en la evaluación de nuestro personal debemos definir una metodología clara y eficiente, hacer uso o combinar los diferentes tipos de evaluación, evitar los errores comunes a la hora de evaluar y ser justos en todos los sentidos con aquellos que bajo nuestra supervisión estamos evaluando.

¡Que Dios nos ayude a usar eficazmente la evaluación para continuar avanzando en el desarrollo del ministerio cristiano!

 

 


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